Resumen
 de la última temporada de Las Palmas donde se desarrollan las distintas
 fases por las que atravesó el conjunto amarillo. La Unión Deportiva 
finalizó el curso en la novena posición de la Liga Adelante.
La temporada 2011-2012 de la Unión Deportiva Las Palmas podría catalogarse como de tranquilidad, relativa eso sí, dado que en la casa amarilla nunca llueve a gusto de todos. Se cumplió el objetivo principal -permanencia sin pasar apuros como en anteriores campañas- y hubo algunos momentos en los que se coqueteó con la promoción de ascenso a Primera División. El técnico grancanario Juan Manuel Rodríguez, después de salvar al equipo la temporada anterior del descenso de categoría, se convirtió en el primer entrenador de toda la era del presidente Miguel Ángel Ramírez en sentarse en el banquillo desde la primera hasta la última jornada.
Altas y bajas 2011 - 2012
Como
 cada verano en el seno de la Unión Deportiva, el mercado de fichajes 
fue muy movidito. Hasta 13 futbolistas abandonaron la disciplina 
amarilla: Josico, Guayre, Jorge Larena, Lequi, Borzani, Perea, Samuel, 
Armiche, Pollo, Pindado, Quero, Dani Carril (sin ficha desde diciembre 
de 2010) y Cejudo (traspasado en el mercado invernal 2010-2011 a 
Osasuna). Los refuerzos para la nueva temporada fueron: Javi Castellano,
 Herner, Juan Guerra, Portillo, Laguardia, Dani Castellano, Corrales, 
Francis Suárez (tras regresar de su cesión a la Ponferradina), más la 
presencia habitual (con más o menos minutos) en los entrenamientos del 
primer equipo de los jugadores con ficha del filial Raúl, Roque, Artiles
 y Hernán (este último ya había debutado la temporada anterior). Momo 
fue firmado el día del cierre del mercado de invierno de cara a la 
segunda vuelta del campeonato.
Inicio de curso prometedor
Las
 Palmas hizo múltiples contrataciones para afrontar la campaña, pero sin
 duda los mejores fichajes los tenía en casa. El club pudo mantener a 
Jonathan Viera y a un Vitolo que regresaba a los terrenos de juego 
después de la grave lesión que le hizo perderse casi toda la temporada 
anterior. Tanto uno como el otro rayaron a un gran nivel en el primer 
tramo de la temporada. Tras las tres primeras jornadas el equipo 
figuraba en quinta posición. En los dos siguientes partidos no pudieron 
participar saldándose ambos encuentros con sendas derrotas. Casualmente 
cuando se recuperaron, Las Palmas encadenó una racha de seis jornadas 
sin perder, siendo el momento cumbre de ese mini ciclo los triunfos 
consecutivos ante Alcorcón y Valladolid. Celebradas las 11 primeras 
jornadas del campeonato, el cuadro insular ocupaba un sexto lugar que 
daba provisionalmente acceso al playoff de ascenso.
Noviembre negro y frustrado traspaso de Viera al Granada
Como
 sucediera el año anterior, el sueño se esfumó pronto. Las Palmas en los
 cuatro encuentros disputados en el mes de noviembre obtuvo 1 solo punto
 de 12 posibles. El objetivo era la permanencia, pero se temía que el 
equipo cayera en picado como sucediera en el curso al que se ha hecho 
referencia. Las Palmas pudo revertir la situación y durante 
aproximadamente los tres meses siguientes (parón invernal incluido) el 
conjunto de Juan Manuel Rodríguez ganó todo en casa (a excepción del 
partido ante el Deportivo de La Coruña) pero no logró ningún triunfo a 
domicilio. La Unión Deportiva figuraba en la media tabla produciendo 
críticas en el entorno amarillo sobre el estilo de juego y sobre una 
supuesta falta de ambición, especialmente lejos del Gran Canaria. 
Incluso algunas de esas críticas provenían desde dentro del club en la 
figura de Juanito Rodríguez, asesor del presidente y miembro de la 
dirección deportiva. El día que se iniciaba la segunda vuelta, la Unión 
Deportiva comunicaba en su web oficial el preacuerdo con el Granada para
 transferir a Jonathan Viera a cambio de 3 millones de euros. Éste se 
negó a aceptar el traspaso creándose un debate público entre el 
futbolista y el presidente (ver "El informe Viera").
Renace la ilusión
Después
 de 5 meses sin ganar a domicilio, Las Palmas vence con buen juego al 
Murcia en la Nueva Condomina. Una vuelta entera. Se había ganado fuera 
de casa por última vez en Balaídos y precisamente el siguiente conjunto 
que visitaría el Gran Canaria era el Celta de Vigo. El club de Pío XII 
creó una mini campaña de abonados en pleno curso en tanto en cuanto de 
los siguientes cinco encuentros en disputa, cuatro se celebrarían en el 
recinto de Siete Palmas. El primer envite ante el Celta fue superado con
 éxito. 3 a 1 ante uno de los mejores equipos de la categoría en un gran
 partido del cuadro local. Por primera vez en toda la temporada Las 
Palmas ganaba tres partidos consecutivos (Girona, Murcia y Celta). El 
siguiente rival era otro de los de arriba. El Almería arrancó un punto 
de la isla con dos goles de Ulloa. Los amarillos habían desplegado un 
fútbol vistoso ante dos de los equipos que aspiraban al ascenso y a 
pesar de las tablas con el cuadro almeriense, la distancia con la 
promoción se redujo a seis puntos.
Nuevo bache y aguas revueltas
Como
 sucediera en el mes de noviembre anteriormente comentado, Las Palmas se
 volvió a desinflar. Encadenó seis partidos consecutivos sin conocer la 
victoria (un triunfo en 9 jornadas). En este intervalo de tiempo, el 
equipo grancanario se seguía moviendo por la zona templada de la tabla 
con la permanencia virtual asegurada (objetivo principal comunicado por 
parte del club antes de iniciarse la Liga Adelante) pero con una imagen 
que provocó el enfado de aficionados, prensa, algún jugador y 
presidente. Básicamente el plantel era acusado de bajar el pistón cuando
 se cumplió el objetivo y de no tener ambición por aspirar a cotas más 
altas. En esa línea se mostró el guardameta argentino Mariano Barbosa, atribuyendo al vestuario amarillo falta de actitud. Pocas semanas más tarde el presidente Miguel Ángel Ramírez sería más explícito afirmando sentir vergüenza
 con el comportamiento de algunos futbolistas. Por otra parte, el 
entrenador nunca ha contado con el beneplácito de buena parte de la 
grada y de la prensa, acentuándose las críticas cuando los resultados no
 han acompañado. En medio de la vorágine, Jonathan Viera fue finalmente 
traspasado al Valencia a cambio de 2 millones y medio de euros (dos 
millones fijos más medio en variables). Toda vez que Las Palmas no tenía
 objetivos tangibles por los que pelear, las partes acordaron que el 
jugador no disputase el final de temporada.
Último mes intrascendente y balance final
Sin
 ningún objetivo ni por arriba ni por abajo más que el de terminar la 
temporada dignamente, Las Palmas afrontó el último mes de competición. 
Tres victorias se consiguieron en el sprint final, con actuaciones más 
que aceptables en líneas generales. Vitolo finalizó el campeonato como máximo goleador amarillo con 10 tantos. La Unión Deportiva Las Palmas 
terminó clasificada en novena posición -a 13 puntos de la promoción de 
ascenso y 18 puntos sobre el descenso (12 de no haber descendido por 
arrastre el Villarreal B)- con 58 puntos en la temporada más desahogada 
de los últimos años. Prueba de ello es que, como se decía al inicio del 
texto, Juan Manuel Rodríguez es el primer entrenador de la era Ramírez 
-desde 2005 como presidente- en empezar y acabar una temporada. El 
equipo isleño realizó a lo largo del curso algunos buenos partidos 
(especialmente como local), otros regulares y algunos otros malos 
(especialmente a domicilio). El año clasificatoriamente ha sido 
tranquilo, nunca peligró la permanencia en la categoría y en algunos 
momentos se activó la ilusión por alcanzar el playoff. Pero el frustrado
 traspaso de Viera y su salida después, la mala imagen ofrecida por el 
equipo en algunas fases de la Liga Adelante, las declaraciones 
altisonantes de Barbosa, el enfado público del presidente y las 
opiniones de su asesor; hacen que la temporada 2011 - 2012 pueda ser 
catalogada como de tranquilidad... relativa.
Fotos: CDR (udlaspalmas.es)



Magnífica entrada. Un fuerte abrazo, Bryan.
ResponderEliminarMuchas gracias Malena, me alegra mucho que te haya gustado. Otro fuerte abrazo para tí.
ResponderEliminar